Hola hermanos bendecido día. Feliz Navidad. Hoy vamos a tener nuestro segundo pasaje con el motivo de la navidad. Como seguramente lo saben, la navidad significa nacimiento, celebramos el nacimiento de Jesús, la próxima semana conoceremos los detalles del mismo, pero hoy hablaremos qué paso justo antes, la anunciación de la venida del Señor a este mundo y como fue esto. Aprenderemos algunos aspectos de quién es ese niño que nacería y el ejemplo de fe de María, la sierva de Dios escogida para esta hermosa y privilegiada tarea de llevar al Señor en su vientre.

Ayer pasaba por algunas de las calles comerciales de alrededor y veía mucha gente comprando y vendiendo cosas, ropa, comida, juguetes, regalos, etc. Es un lindo momento para compartir, pero me preguntaba ¿Será que la mayoría piensa que la navidad es solo para esto o cuántos saben que celebramos a Jesús y por qué? Es para tenerlo en cuenta.

Al comenzar el pasaje de hoy, versículo 26, comienza así “A los seis meses”, ¿a los 6 meses de qué? Un anciano sacerdote llamado Zacarías le tocó ofrecer incienso a Dios en el santuario, allí se le apareció el ángel Gabriel para decirle que iba a tener un hijo con su anciana y estéril esposa Elisabet, a lo que Zacarías, con miedo, dudó de que fuese posible así que quedó mudo hasta que naciera Juan el Bautista, ese que cuando se hizo hombre sería consagrado para Dios y llamaría al pueblo al arrepentimiento para preparar camino para el Señor.

Este mismo ángel Gabriel, ángel servidor de Dios, visitó a la doncella María, en Nazaret, pueblo de ella y de José su prometido, esta aldea lejos de Jerusalén (110Km). En muchos sentidos era bastante insignificante,  pero al mismo tiempo menospreciado porque era visitado  a menudo por mercaderes gentiles y soldados romanos. Por eso tenía mala reputación. Una vez un recién convertido de Jesús, Felipe invitó a Natanael a seguirle a Jesús de Nazaret y éste le respondió: Juan 1:46 ¿De Nazaret puede salir algo de bueno? Le dijo Felipe: Ven y ve. Y si, Dios escogió este humilde y remoto lugar para que Jesús fuese engendrado y criado.

Además de esto, María era una mujer desposada, es decir, comprometida para casarse. Para los judíos esto era así: 1. Compromiso - un acuerdo formal hecho por los padres. 2. Desposorio - la ceremonia en la que se hacen promesas mutuas. Matrimonio: aproximadamente un año después, cuando el novio llega en un momento inesperado para su novia, y esta fiesta dura una semana. Cuando una pareja estaba comprometida, estaban bajo las obligaciones de fidelidad y se requería un divorcio para romper el compromiso. 

Esta era la situación de María cuando Gabriel vino a saludarla de esta manera: Leamos: ¨28 Y entrando el ángel en donde ella estaba, dijo: ¡Salve, muy favorecida! El Señor es contigo; bendita tú entre las mujeres 29 Mas ella, cuando le vio, se turbó por sus palabras, y pensaba qué salutación sería esta. 30 Entonces el ángel le dijo: María, no temas, porque has hallado gracia delante de Dios. María tuvo miedo, ella no hablaba con Gabriel todos los días ni con ningún ser celestial, ¿Qué es esto? ¿Qué está pasando aquí? Dijo. Igual que nosotros y muchos siervos de Dios en la biblia, ante la presencia celestial santa temblamos, automáticamente nos autoevaluamos si somos dignos de estar ante Dios y nos damos cuenta de que No y nos da temor. Suele pasar cuando recibimos una palabra muy directa para nosotros, una exhortación, o cuando oramos y vemos la gran bondad de Dios aún más allá de lo que esperábamos, cuando Dios nos libra de algo muy malo pero nosotros andábamos lejos de él, cuando sabemos que Dios está muy cerca de nosotros y nos hace un llamado. Nos da temor. Pero el ángel le dijo, no temas María porque has hallado gracia delante de Dios, Dios no se equivocó, no necesitas ser o hacer nada más de lo que eres, todo va a estar bien, no morirás, has sido escogida por su gracia”. Dios la escogió a María no porque fuera de la familia sacerdotal como Zacarías, no porque fuera muy inteligente o hábil, no porque fuera perfecta, no porque fuera del linaje de David principalmente, porque lo era, sino por su gracia infinita. 

Sin duda, es inigualable e irrepetible la bendición que recibió María. Pero es importante meditar que nosotros también somos muy pero muy favorecidos por el Señor. El favor es recibir algo de otra persona sin dar nada a cambio. Es fácil pensar que el favor de Dios es recibir alguna bendición humana. Ganarse la lotería, ser bendito y próspero en todo lo que hagamos en este mundo, que Dios responda así de rápido en todo lo que pedimos, uh si vemos a alguien así podríamos pensar “que persona tan favorecida” quisiera tener esa gracia. Pero el concepto bíblico de "favor" significa otra cosa, significa "la gracia de Dios para los pecadores al perdonarnos y salvarnos". La misma María describe más adelante, en un hermoso cántico a Dios, el favor recibido:

¨46 María respondió: —Oh, cuánto alaba mi alma al Señor. 47  ¡Cuánto mi espíritu se alegra en Dios mi Salvador! 48a Pues se fijó en su humilde sierva,

¨Prov. 8:35 Pues todo el que me encuentra, halla la vida y recibe el favor del Señor.

¿Quienes hemos recibido el favor del Señor? Los que nos encontramos con Dios cuando él nos buscó y aceptamos con humildad que es nuestro Salvador, allí recibimos la gracia de la vida eterna.

La semana pasada escuchamos hermosos testimonios y pensaba qué grande es la gracia de Dios para nosotros, a todos nos sacó de la muerte, llevando todos nuestros pecados en la cruz y dándonos una nueva vida. Yo me sentía muy favorecido por mi salvación y también por mi misión.

María también fue muy favorecida al recibir la misión de Dios, una misión específica. ¨31 Y ahora, concebirás en tu vientre, y darás a luz un hijo, y llamarás su nombre JESÚS. Ella debía llevar en su vientre a Jesús, y además acompañar su crecimiento humano en este mundo. //

Antes de hablar de Jesús me gustaría meditar en cuan bendecidos o favorecidos somos por la misión que Dios nos da. Recordemos que María era una mujer comprometida, ella solo pensaba en José, en el vestido de novia y en los preparativos. Pero si ella quedaba embarazada todos sus planes serían destruidos, no serían nada, sin contar que iba a ser acusada de adulterio e iba a ser apedreada. No parece ser una gran bendición la misión que Dios le estaba encomendando viéndolo desde este punto de vista limitado. 

Esto nos suele pasar, que estemos completamente centrados en nuestros planes, o aún en nuestras limitaciones, situaciones difíciles de la vida e incapacidades que no nos permitan ver la misión de Dios como un gran privilegio, como un favor de Dios, entonces menospreciándola, podríamos participar en ella si es que no hay cualquier otra cosa que hacer. Y para mí fue fácil escribir estas líneas porque me estaba describiendo a mí mismo, después de situaciones complicadas y fracasos, no he valorado la misión de Dios como una gran bendición y favor, he olvidado que, como con María, el Señor es conmigo y que he hallado gracia delante de Dios para servirle. Aunque me siento impedido en muchos sentidos esta palabra me hace recordar que no depende de mi poder o perfección sino de su poder, su poder se perfecciona en nuestra debilidad. Amén!//////

Ahora si hablemos del protagonista, Jesús. ¿Quién sería este niño que nacería?

Jesús, significa el Señor salva, su nombre nos deja saber que él sería nuestro Salvador. Aunque era un niño débil, de una familia muy común y sencilla, este no sería cualquier persona ni mucho menos.

¨ 31b-33 y llamarás su nombre JESÚS. Este será grande, y será llamado Hijo del Altísimo; y el Señor Dios le dará el trono de David su padre; y reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin.

Hasta el día de hoy Jesús es la persona más reconocida del planeta, estamos en el 2021 después de su nacimiento, él dividió la historia en dos. Pero aún así debemos saber que esta no es la grandeza que él perseguía. Según el mismo Jesús en mateo 20:26 “…el que quiera entre vosotros llegar a ser grande, será vuestro servidor,” Esto fue lo que hizo Jesús en esta tierra, servirnos hasta dar su vida. Él vino para anunciar buenas nuevas a los pobres, a sanar los corazones heridos, a perdonar nuestras iniquidades.

¨ Isaías 9: 2 El pueblo que andaba en tinieblas vio gran luz; los que moraban en tierra de sombra de muerte, luz resplandeció sobre ellos. ... 6 Porque un niño nos es nacido, hijo nos es dado, y el principado sobre su hombro; y se llamará su nombre Admirable, Consejero, Dios Fuerte, Padre Eterno, Príncipe de Paz. 7a Lo dilatado de su imperio y la paz no tendrán límite, sobre el trono de David y sobre su reino, disponiéndolo y confirmándolo en juicio y en justicia desde ahora y para siempre.

Dios cumplió la profecía hecha sobre el Rey David, de su linaje vino este niño para reinar, pero no un reino terrenal sino uno espiritual, uno que trae luz en medio de la oscuridad, un admirable ejemplo, un consejero perfecto, trajo sabiduría de Dios, porque él es Dios Fuerte, Padre eterno, Príncipe de Paz, el único que puede darnos la paz que ningún gobernante puede darnos. Porque su reino es bueno y eterno. Su esperanza para nosotros es la vida eterna después de nuestra muerte terrenal. La semana pasada aprendimos que Jesús es el verbo hecho carne, estaba con el Padre desde el principio, es Dios creador, al venir a este mundo sería llamado Hijo de Altísimo, la relación más intima posible con Dios Padre. Él es Rey de Reyes y Señor de Señores y ahora está sentado a la diestra del trono de Dios en los cielos gobernando con poder y gran gloria. Yo oro que Jesús gobierne en nuestros corazones. Amén?

Veamos la respuesta de María ¨34 Entonces María dijo al ángel: ¿Cómo será esto? pues no conozco varón. 35 Respondiendo el ángel, le dijo: El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por lo cual también el Santo Ser que nacerá, será llamado Hijo de Dios.  La pregunta de María fue lógica, cualquiera la haríamos. Siempre que no nos dejemos llevar por la lógica antes que la fe, que a veces supera la lógica, no hay problema en querer profundizar más cómo Dios quiere trabajar en nuestra vida, Dios en su misericordia ayuda a nuestra incredulidad. El ángel le explicó a María cómo sería esto posible, cómo sería posible que Dios, el Santo Ser sería engendrado en su vientre y ella pudiera vivir. Ella y él iban a estar bien porque el poder del altísimo los cubriría, el poder creador de Dios haría la concepción en su vientre y la vida de Jesús estaría en el Espíritu Santo. Gloria a Dios por venir a este mundo aún de esta manera, siendo un ser tan diminuto como un embrión, siendo como uno de nosotros en todo sentido. Gloria al Señor, amén?

Gabriel animó a María haciendole saber el testimonio de sus parienta Elizabet, ella conocía perfectamente que era imposible que su tía Eli quedara embarazada, pero Dios lo hizo posible. Aquí vemos cuán importante es recordar los testimonios de fe, los bíblicos, los de otros y los nuestros mismos del pasado. Dios ha intervenido para hacer lo imposible posible. Parecía imposible que dejáramos cierto pecado o cierto estilo de vida auto destructor, o parecía imposible tener paz en medio de una situación difícil, pero Dios lo hace posible. Recordar nos ayuda a preparar nuestro corazón para una nueva experiencia de fe con la palabra de Dios. Dios dejó esta palabra final para María: ¨37 porque nada hay imposible para Dios. 

Ante esto, María respondió: ¨ 38 Entonces María dijo: He aquí la sierva del Señor; hágase conmigo conforme a tu palabra. Y el ángel se fue de su presencia.

María sabía que su vida corría peligro, que su reputación quedaba manchada, que José sufriría mucho, que su ilusión matrimonial se haría añicos. Pero ella dejó estas cosas en las manos de Dios primeramente. Ella no pidió un tiempo para orar y conocer la voluntad de Dios porque era muy clara, ella se entregó a la voluntad de Dios antes que actuar según su lógica, o su emoción, o de forma egoísta, ni tampoco decidió esto con tristeza y resignación sino con gran alegría aceptó la tarea encomendada. 

La decisión obediente de María se basó en dos cosas: 1. Reconocer quién era ella, la sierva del Señor, el siervo sabe bien que no es Dios, que no es quien para desobedecer al Señor, nosotros confiamos en nuestro Señor, porque todo lo que nos pide es para su gloria y para nuestra bendición final. 2. Ella obedeció la palabra de Dios, ella creyó esta palabra: porque nada hay imposible para Dios. Hemos hablado que María fue muy favorecida por tener a Jesús en su vientre, pero el mismo Jesús le enseñó lo siguiente a una mujer en Lucas 11:27-28  Mientras Jesús decía estas cosas, una mujer de entre la multitud exclamó: —¡Dichosa la mujer que te dio a luz y te amamantó! —Dichosos más bien —contestó Jesús— los que oyen la palabra de Dios y la obedecen. Guao, dichosos los que, no solo oyen la palabra de Dios, sino que la obedecen, aun cuando sea muy difícil hacerlo, dichosos. Realmente María fue muy dichosa al obedecer la palabra de Dios, aún hoy nosotros somos bendecidos por esta decisión de fe. 

A lo largo de nuestra vida, constantemente tomamos grandes decisiones que dan forma a nuestras circunstancias futuras. En este tiempo de maldad e incertidumbre en el mundo, necesitamos una dirección sólida en la vida. Entonces, ¿cómo se toman las grandes decisiones? Si queremos ser tan favorecidos como María, debemos mostrar humildad ante el Señor, sumisión, el deseo de servir al reino de Dios, y sobre todo de reflexionar sobre la palabra de Dios con mucho interés y luego obedecerla.

Hermanos que confesemos como María: Soy el siervo del Señor, hágase conmigo conforme a tu palabra. Amén

Hoy aprendimos muchas cosas. Somos muy favorecidos al ser salvos por Jesús, y podemos serlo mucho más en la medida que dejamos que él sea nuestro Señor y obedezcamos sus palabras. En especial hoy reflexionamos sobre la grandeza de Jesús, él es nuestro Rey Eterno, Hijo del Altísimo, en él esta nuestra esperanza. Amén.